19 nov 2008

LA ESCALERA

Ven a mis brazos mujer
y busca cobijo en ellos
que yo te quiero llevar
conmigo a ver mundos nuevos
que aunque sean ficticios
y solo los vemos en sueños
no dejan de estar allí
para que podamos verlos.
Te construiré una escalera
con las estrellas del cielo,
la adornaré con guirnaldas
que recogeré del suelo,
y la subiré contigo
para estar cerca del cielo
para que tus verdes ojos
puedan contemplar desde lo alto
lo lejos que estás del suelo.
Esos ojos que yo anhelo
y que quisiera besar
y guardar en mi recuerdo
para poder venerar
y paliar mi sufrimiento.
Eres sobrenatural,
tu cuerpo es la armonía,
tu rostro, tus manos, tu pelo...
Cada curva de tu cuerpo
es digna de exaltar,
esos hoyuelos graciosos
que se forman cuando ríes
en tus rosadas mejillas,
todo eso que yo anhelo
lo tienes tú, vida mía.
Eres un ser especial
que yo admiro y venero.
¡Jamás ví tanta belleza!
Tengo miedo, tengo celos,
quiero hacer una escalera
para estar cerca del cielo,
y que no mires a otros
y me destrocen los celos.
27/10/2008

EL ROCÍO

Unas gotas de rocío
ví aflorar en tus ojos,
rodaron por tus mejillas
humedecieron tus labios
de los cuales aún conservo
ese sabor a cereza.
Eso trae a mi mente
aquellos tiempos felices.
Vivo con estos recuerdos
deseando que algún día
vuelvas a echarme a faltar.
Ruego que recapacites,
volveremos a empezar
donde un día lo dejamos,
volveremos a reir
como lo hacíamos antaño,
todo será distinto
habrá amor y confianza,
intentémoslo, cariño,
no quiero volver a ser
aquél ser hosco y huraño
que a pesar de que te quería
sé que te hice mucho daño.
Hoy te he visto llorar,
fueron gotas de rocío,
sé que llorabas por mí...
¡Intentémoslo, amor mío!
25/10/2008

LA PUERTA

¡Abre la puerta, mujer!
Estoy aquí desde anoche
apoyado en tu dintel.
Anda... y no seas esquiva
está pronto a amanecer
y no quiero que me vean
suplicándote, mujer.
¿Para qué alargar la espera?
si al final me vas a abrir.
Aunque ahora no lo creas
yo sé que estás luchando
tratando de retenerte,
te da miedo que al abrir
vuelva a pasar lo de siempre.
Te prometo que he cambiado
y que me portaré bien
si puedo estar a tu lado.
¡No perdamos más el tiempo!
y ten caliente la cama
que tú sabes que entraré,
si no es hoy será mañana...
¡Abre la puerta, mujer!
26/10/2008